Nutricion y Conducta
Dr. Julio Salazar Gonzales
Psicoterapeuta
Nutricionista
La estrecha relación entre la nutrición y el comportamiento esta fuera de duda alguna, sabemos muy bien que los alimentos pueden tener efectos neuromoduladores y desencadenar conductas disruptivas, déficit de atención, hiperactividad y muchos otros comportamientos enmarcados sobre todo en el espectro del autismo. Un simple ejemplo del que podemos darnos cuenta al tomar la acostumbrada taza de café que nos despierta y activa por las mañanas. A lo largo de los trabajos anteriores describí ampliamente este tema que complementare con mayor información al respecto sobre todo a la estrecha relación de los alimentos y sus efectos neuromoduladores.
Los neurotransmisores cerebrales responsables de nuestras sensaciones y conductas son elaborados en nuestro organismo por los nutrientes específicos para cada uno de ellos, citando un ejemplo la serotonina, neurotransmisor responsable de la tranquilidad tiene como precursor principal al aminoácido triptófano. Niveles bajos de serotonina están asociados a la depresión, déficit de atención, ansiedad, agresividad y este tipo de conductas disruptivas asociadas a esta deficiencia nutricional pueden ser modificados con la ingesta del triptófano.
El equilibrio de los neurotransmisores tiene que ver con una adecuada conducta, es decir con claridad y serenidad en nuestros pensamientos y sobre todo nuestras sensaciones. Estos desequilibrios pueden presentar deficiencias alimenticias así como también pueden ser producidos por la inhibición de los mismos producto de sustancias análogas como el acido hidroxifenil hidroxipropiónico producido por la bacteria Clostridia. Este acido en cantidades grandes puede alterar diversas funciones en el organismo y entre ella están las funciones de neurotransmisores cerebrales al estar involucrada la mal absorción intestinal que influye en las alergias neuromoduladoras provenientes de los péptidos Opioides de la alimentación. Focal white matter lesions in brain of patients with inflammatory bowel disease. Lancet 345, 897 898
Las susceptibilidades alimenticias IgG al gluten y caseína producen estimulación de los receptores Opioides en el cerebro lo cual tiene como efectos neuromoduladores la sobre estimulación de la producción de endorfinas, encefalinas y dopamina produciendo alteraciones en la percepción, comunicación, socialización y función psicomotora. Además estos péptidos Opioides provenientes del gluten y la caseína inhiben el trabajo del acido gamma amino butírico GABA el freno natural del sistema cerebral. El gran problema es que al no funcionar el freno natural de manera adecuada no se frena la producción de los neurotransmisores mencionados anteriormente produciendo severas alteraciones en el comportamiento y conducta en general. Summary of Dietary, Nutritional, and Medical Treatments for Autism, based on over 150 published research studies. 2013
Nutricion y Conducta
Dr. Julio Salazar Gonzales
Psicoterapeuta
Nutricionista
La estrecha relación entre la nutrición y el comportamiento esta fuera de duda alguna, sabemos muy bien que los alimentos pueden tener efectos neuromoduladores y desencadenar conductas disruptivas, déficit de atención, hiperactividad y muchos otros comportamientos enmarcados sobre todo en el espectro del autismo. Un simple ejemplo del que podemos darnos cuenta al tomar la acostumbrada taza de café que nos despierta y activa por las mañanas. A lo largo de los trabajos anteriores describí ampliamente este tema que complementare con mayor información al respecto sobre todo a la estrecha relación de los alimentos y sus efectos neuromoduladores.
Los neurotransmisores cerebrales responsables de nuestras sensaciones y conductas son elaborados en nuestro organismo por los nutrientes específicos para cada uno de ellos, citando un ejemplo la serotonina, neurotransmisor responsable de la tranquilidad tiene como precursor principal al aminoácido triptófano. Niveles bajos de serotonina están asociados a la depresión, déficit de atención, ansiedad, agresividad y este tipo de conductas disruptivas asociadas a esta deficiencia nutricional pueden ser modificados con la ingesta del triptófano.
El equilibrio de los neurotransmisores tiene que ver con una adecuada conducta, es decir con claridad y serenidad en nuestros pensamientos y sobre todo nuestras sensaciones. Estos desequilibrios pueden presentar deficiencias alimenticias así como también pueden ser producidos por la inhibición de los mismos producto de sustancias análogas como el acido hidroxifenil hidroxipropiónico producido por la bacteria Clostridia. Este acido en cantidades grandes puede alterar diversas funciones en el organismo y entre ella están las funciones de neurotransmisores cerebrales al estar involucrada la mal absorción intestinal que influye en las alergias neuromoduladoras provenientes de los péptidos Opioides de la alimentación. Focal white matter lesions in brain of patients with inflammatory bowel disease. Lancet 345, 897 898
Las susceptibilidades alimenticias IgG al gluten y caseína producen estimulación de los receptores Opioides en el cerebro lo cual tiene como efectos neuromoduladores la sobre estimulación de la producción de endorfinas, encefalinas y dopamina produciendo alteraciones en la percepción, comunicación, socialización y función psicomotora. Además estos péptidos Opioides provenientes del gluten y la caseína inhiben el trabajo del acido gamma amino butírico GABA el freno natural del sistema cerebral. El gran problema es que al no funcionar el freno natural de manera adecuada no se frena la producción de los neurotransmisores mencionados anteriormente produciendo severas alteraciones en el comportamiento y conducta en general. Summary of Dietary, Nutritional, and Medical Treatments for Autism, based on over 150 published research studies. 2013
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